Sin Residentes no hay Hospital
Para entender mejor qué está pasando con los médicos residentes en el país.
DEFINICIONES
Primero, hay que definir qué es la “Residencia médica”, según el reglamento de la CONAREM es “El periodo de formación de postgrado en el cual el profesional médico (el médico residente) recibe entrenamiento en servicio en una determinada especialidad o subespecialidad”.
Cada médico residente debe firmar anualmente un CONTRATO-BECA que se define como un “Acuerdo entre la Institución Pública o Privada y el Profesional Médico que accedió por concurso a una plaza de Residencias Médicas, por la cual se establecen las condiciones recíprocas durante el proceso de formación (derechos y obligaciones), regulado por el presente reglamento, la legislación administrativa y civil respectivamente. No le es aplicable la legislación laboral”.
Actualmente, el médico residente no cuenta con un marco legal que lo proteja y se ampara netamente a lo que estipule la Comisión Nacional de Residencias Médicas (ente dependiente del Instituto Nacional de Salud).
Los Números
Los hospitales que cuentan con médicos residentes son 36 en todo el país.
En 2019 se ofertaron 472 lugares y en 2020 un total de 524.
El salario de un médico residente va de Gs. 4.000.000 a 4.500.000.
El total de horas de trabajo semanales promedio es de: 154 hs. (suponiendo los días de guardia (cada 3, 4 o 5 días)con jornadas de 29 horas y días sin guardia 10 horas, sábados libres 6 horas). Esto varía según la especialidad o subespecialidad.
La Legislación Inexistente
El médico residente trabaja más de 100 horas semanales y el Estado los considera simples médicos en formación. Desconociendo totalmente la existencia del Art. 8 del Código Laboral que expresa: “Se entiende por trabajo, a los fines de este Código, toda actividad humana, consciente y voluntaria, prestada en forma dependiente y retribuida, para la producción de bienes o servicios”. Así también, el Art. 17: “Contrato de trabajo es el convenio en virtud del cual un trabajador se obliga a ejecutar una obra o a prestar un servicio a un empleador, bajo la dirección o dependencia de éste y por su cuenta, mediante el pago de una remuneración, sea cual fuere la clase de ella”.
El médico residente es la columna vertebral de los grandes hospitales, son la fuerza impulsora de todo un sistema. Sin ellos no se podría prestar servicio alguno en los grandes hospitales, se verían totalmente rebasados.
El médico residente brinda un servicio, este servicio es remunerado mensualmente, realiza un trabajo según la definición de nuestro código laboral. La falta de un marco legal precariza el trabajo realizado por cientos de médicos a diario.
Al decir del reglamento de la CONAREM, que es un CONTRATO-BECA, se desconoce totalmente la antigüedad laboral, se priva la posibilidad de aportar para lograr una jubilación digna.
Esto es básicamente, lo que se necesita saber para entender por qué los médicos están en pie de guerra contra un sistema que les escupe a la cara todos los días.